Para Ambríz el fútbol es un engaño

Los Expertos Opinan


1.¿Consideras que el fútbol es engaño?

2, ¿Se debe considerar picardía que el jugador engañe al árbitro?

CHRISTIAN MARTINOLLI COLUMNISTA DE RÉCORD

Con base a lo que ves, creo que sí. El fútbol es un entretenimiento y un deporte, pero no es la idea sacar un beneficio de un engaño; se supone que el Guadalajara es un equipo formativo, sobre todo con un técnico como Ignacio Ambriz, quien me parece una persona de una sola pieza y jugó al fútbol, pueda solaparle un beneficio basado en el engaño a un jugador; eso me parece increíble.

Aveces dicen que es avivarse, en Argentina se conoce como picardía y podemos empezar con lo que hizo Maradona o Henry y el tema de las manos, pero no se acabaría nunca la discusión, entiendo que picardía, engaño o como se le llame, forma parte del juego como los errores del arbitro y de los propios futbolistas, pero en el estricto sentido de la competencia no debe ser asL Puedes liaberlo hecho, pero lo que no creo que sea válido es vanagloriarte de engañar, es hasta cierto punto cínico haber engañado y todavía solaparlo. Eso en otras latitudes no es así, países primermundistas atrapan al culpable y es castigado.

RUBÉN OMAR ROMANO | DIRECTOR TÉCNÍCO

No, el fútbol no es un engaño. El engaño aun rival es una finta, el engaño es mirar hacia un lado y tocar hacia el otro. Yo creo que se refiere a esa clase de engaño. No es la primera vez que eso pasa (que un jugador simule una falta dentro del área), tampoco se puede dramatizar tanto, yo creo que hay que concienciar más a los jugadores de que se tiene que ganar por las mejores formas y eso no es la mejor forma.

La picardía a veces está mal entendida. Para mf no hay ningún logro. A veces hay contactos que no se notan, que parecen muy dramáticas las caídas, pero en el Fair Play no debería de existir eso, pero sabemos exactamente que en el fútbol todo eso acontece desde mucho tiempo atrás.

LUIS GARCÍA ICOLUMNISTA DE RÉCORD

Es un juego de letras como tal, se vale el engaño bien entendido, que es el amague, el voy a hacer una cosa y hago otra; pero decir que el fútbol es un engaño, es un juego de letras, pero debería ser bien entendido, engañar y decir voy por izquierda y te salgo por derecha, es muy válido. Engañar en el fútbol es un concepto fuera de lugar.

No, desde ningún punto de vista. Yo lo considero una mala costumbre, la mayoría de los jugadores que pretenden hacer eso son tipos mal entrenados, con muy malas costumbres, que les sale de un lugar muy natural el tirarse un clavado, el exagerar una patada y todo ese tipo de cuestiones.


JOSÉ ANTONIO NORIEGA | ANALISTA DE ESPN

En el fútbol el engaño es valioso, pero un engaño con límites; es decir, el engaño traducido en fintas, en amagues, en cuestiones lícitas del juego, pero ya el engaño al juez, para todos los que seguimos el partido no es parte de la esencia, al revés, es algo que hay que combatir y tratar de minimizar.

En lo absoluto. Eso se tiene que corregir. Por supuesto que lo hace mucha gente, pero es más acentuado en el fútbol latino, en general, no latinoamericano. El anglosajón es un poco más honesto y a veces también se equivocan. Tenemos que buscar erradicarlo y eso se podría hacer educando a los jugadores desde jóvenes para que esto no se busque más. También hay que encontrar métodos para que cuando aparezca, detectarlo.

FELIPE RAMO RIZO / ANALISTA RÉCORD

El arbitro actualmente tiene que luchar contra 22 jugadores que tratan de engañarlo; él no sabe quién trata de engañarlo, pero llega un momento en que un jugador trata de sacar una ventaja desleal y contra eso tiene que competir el arbitro. En general, no creo que el fútbol sea un engaño, pero sí el arbitro tiene que competir contra ciertos jugadores que tratan de sacar una ventaja desleal.

El No, todo lo contrario, por eso la Comisión Disciplinaria decidió sancionar a aquel jugador que su equipo lograra un tanto y que se reflejara ese engaño en el marcador. No es un logro, es una trampa desleal con la cual un jugador hace que su equipo gane. Es ganar un partido a base de la trampa; y ¿el Fair Play?

El fútbol es engaño

Al parecer, una declaración de Ignacio Ambriz cambió los ideales de Chivas y restó importancia al Fair Play que tanto promueve FIFA. El técnico salió en defensa de Érick Torres, quien fingió una falta dentro del área en Puebla, pero lo único que logró fue abrir un tremendo debate.

"Hoy es muy fácil (descubrir a un jugador), cuando yo jugaba metía cada trompada y ni cuenta se daban, hoy hay muchas cámaras y no es fácil, la gente de atrás (en televisión) lo mira una y otra vez y saca conclusiones. El arbitro decide en fracciones de segundo", declaró Ambriz al inicio de su conferencia de prensa.

"Pareciera que la esencia del fútbol y esas cosas tan bonitas como lo son la maña, son mal vistas, cuando siempre ha sido así, y hoy la gente que analiza tiene la fortuna de tener muchas cámaras. Lo importante para mí es que la esencia del fútbol no se pierda; el fútbol es engaño, es error, es acierto, ése es mi punto de vista y respeto los demás. El fútbol debe tener esa esencia tan bonita dentro de la cancha".

Esto desencadenó una ola de críticas hacia el técnico de Chivas, equipo que se ha empeñado en enviar un mensaje de deportivismo y que ha lanzado todo tipo de campañas a favor del juego limpio y en contra de la violencia.

"Siempre apelo a la esencia del fútbol, a ese entre comillas que se equivoca el arbitro, que puedes fingir, aceptar o no. Me pueden decir que estoy mal, pero es mi opinión, el fútbol tiene una esencia tan bonita de ser picaro dentro de la cancha. Al final es fútbol", agregó.

Por la tarde, llegó la respuesta del Instituto Johan Cruyff en México, que por medio de Twitter refutó las ideas expresadas por el técnico de Chivas.

Cerca de las 20:00 horas, Ambriz tuvo que hablar de nuevo respecto al tema e intentar retractarse sobre lo dicho por la mañana. Fue entrevistado en TDN, pero poco pudo hacer para solucionar el lío en el que se metió.

"Al final, simplemente todos podemos tener errores, me pude equivocar en lo que dije, pero si hubiera hablado de que el Cubo se equivocó, se habrían hablado cosas buenas o malas de mí, pero trato de ser como soy, un tipo franco, y sé que causé revuelo, pero sí puedo asegurar que a mis jugadores nunca les pido que engañen o que se tiren y sean malaleche para ensuciar el partido, pues la filosofía de Chivas es el juego limpio", explicó Nacho Ambriz.